lunes, 14 de julio de 2008

La Clave, en situación critica, podría desaparecer

EXCLUSIVA PR. Ya lo venía anunciando prnoticias en los últimos tiempos y, parece, que el tiempo nos da la razón. Según las últimas informaciones llegadas a nuestra redacción, el final de La Clave está cada vez más cerca, ‘inminente', nos comentan algunas fuentes. Sí, porque todavía está en el aire si podrá salir el último número (despedida y cierre) fechado para el 18 de julio, o si por el contrario no la volveremos a ver en nuestros quioscos.
Las dudas se ciernen en un panorama que se tilda, quizás, demasiado negro. Los problemas económicos están haciendo estragos en una redacción en la que la incertidumbre es la tónica general. El medio dirigido por José Luis Balbín carece de financiación alguna tras la salida de la Familia Cort que, unido a la actual situación de los medios y la publicidad, hacen reducir las posibilidades de supervivencia de la publicación.
Apuntan distintas informaciones llegadas a prnoticias, que se estaría haciendo todo lo posible por alargar la vida a un medio que cada día se asemeja más al clásico de Gabriel García Márquez ‘Crónica de una muerte anunciada'. Incluso, según nos cuentan, el pasado 30 de junio se intentó, a última hora, lograr alcanzar un acuerdo de financiación con un grupo editorial, pero parece ser que esta ‘penúltima' opción se ha venido abajo.

Bic crea un movil que se venderá en Kioscos


El BicPhone se lanzará a 49 euros el próximo 8 de agosto y tiene 60 minutos en llamadas Bajo el eslogan de «enciende y llama» el terminal se entrega con su propia tarjeta SIM .


Mientras Apple recoge los frutos de ese aparato suma de prestaciones, diseños, y tecnologías llamado iPhone 3G, otras compañías buscan respuesta para los clientes que huyen de la complicación. Es el caso de la marca de bolígrafos y cuchillas de afeitar Bic. La firma francesa entrará el 8 de agosto en el negocio de los teléfonos ofreciendo un terminal diseñado en busca de la sencillez extrema, pensado para quienes buscan en el móvil un aparato para llamadas y poco más.
Siguiendo ese principio, el consumidor recibirá un terminal que ya está cargado, tiene su propia tarjeta SIM, y 60 minutos en llamadas. No hay contratos, todo funcionará con esa cantidad prepago y posteriores recargas. 'Enciende y llama' es el eslogan con el que Bic presentará una opción que llega bajo alianza con el operador Orange.
Nuevo escaparate
Esa búsqueda de lo directo ha llevado a ambas compañías a penetrar en una red comercial que hasta el momento no pisaba el negocio telefónico: los quioscos. En aeropuertos, estaciones de tren o céntricas calles, los consumidores podrán adquirir un terminal que tiene una validez de doce meses desde su activación en la tienda. Eso sí: de momento solo estará al alcance de los franceses, país piloto en este nuevo concepto de telefonía que nace en dos colores, naranja y lima.
«Son dos modelos desenfadados, modernos y divertidos», anuncian sus comercializadores. La fabricación ha sido subcontratada a la compañía china TCL, que también acuña los terminales de Alcatel.

viernes, 11 de julio de 2008

Distribuidora de Aragón mostró ayer en Zaragoza el funcionamiento del nuevo sistema informatizado de gestión de ventas.


Un total de 60 puntos de venta de prensa diaria de Zaragoza participarán en la prueba piloto de TPV, un nuevo sistema de gestión de ventas que Distribuidora de Aragón (DASA) pretende implantar progresivamente en todos los quiosco a los que presta servicio.
Ayer, una veintena de propietarios de papelerías, quioscos y librerías participaron en la presentación de este sistema, la segunda celebrada esta semana en el hotel Palafox de la capital.
En el transcurso de este acto, el director general de DASA, Óscar Molina, explicó que el sistema ha sido aprobado por la Asociación Española de Editores de Diarios Españoles "para tratar de apoyar y aglutinar a los puntos de venta, facilitar la organización de sus tareas y mejorar la relación que existe entre editores, distribuidores y el punto de venta al público".Así, el sistema TPV, que consiste en un terminal informático con conexión a Internet, pantalla táctil y otros periféricos -impresora de recibos, lectores de códigos de barras, bandas magnéticas y tarjetas chip, resulta "sencillo y manejable" y, como explicó Molina, es adaptable a las necesidades de cada quiosco, ya que "se diseña a partir de las sugerencias de los usuarios". Entre las ventajas de este sistema, está la de eliminar los trámites en papel, facilitar la gestión de pedidos de ejemplares del día y de números atrasados, ser más eficaces en las reservas de clientes. Estos son solo algunos ejemplos de las posibilidades del terminal, que en un futuro podría permitir también la recarga de tarjetas de autobús urbano o de telefonía móvil o la compra de entradas.Además, añadió Molina, la ventaja para los vendedores es que la automatización de las ventas permitirá que conozcan en tiempo real su volumen de ventas, qué artículos son más rentables, y les ayudaría a incorporar nuevas líneas de negocio.Alejandro Santacreu, responsable de la distribuidora alicantina Valdisme, pionera en el uso del TPV, explicó que en Alicante el sistema lleva funcionando con éxito varios años, y que la mayor adscripción a este sistema haría posible que se pudiera ofrecer a los editores de otro tipo de publicaciones periódicas a nivel nacional. Las previsiones de DASA son de instalar entre 5.000 y 6.000 teminales en todo el país.Cada TPV tiene un coste de 3.000 euros, que DASA asume para ofrecérselo de manera gratuita a los 60 quioscos que participen en la prueba piloto, que se extenderá hasta diciembre, y durante los seis meses sucesivos. Además, los vendedores tendrán a su servicio soporte técnico y un curso de formación que se impartirá en las próximas semanas, y un precio ventajoso para el mantenimiento del terminal a partir de un año de uso.
P.D. Estamos en plena pandemia "TPVeril". ¿Será esto como los huevos Sorpresa?.
Un saludo.

sábado, 5 de julio de 2008

Las ventas de libros sufren un ''desfallecimiento'' desde mayo



*El sector vendió más ejemplares en el 2007 pero sus ingresos se estancaron.
• En el primer cuatrimestre del 2008 capeó la crisis gracias a cuatro 'best-sellers'.


ERNEST ALÓSBARCELONA
El sector del libro capeó los compases incipientes de crisis económica durante el año 2007, según el informe anual que presentó ayer la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE). Y, aunque no haya datos firmes, siguió manteniendo el tipo durante el primer cuatrimestre del 2008 a pesar del frenazo de consumo de las familias. Pero a partir del mes de mayo ha empezado una fase de "cierto desfallecimiento" en las ventas, según el director ejecutivo de la FGEE, Antonio María Ávila.Durante los primeros cuatro meses del año, los éxitos de Ken Follett, Carlos Ruiz Zafón, J. K. Rowling y John Boyne mantuvieron una cierta alegría en el sector, sobre todo en los resultados de sus editoriales. El día de Sant Jordi y las ferias del libro de la primavera tuvieron buenas cifras de ventas. "Pero que los lectores compren más libros aprovechando el descuento es más un síntoma de crisis que de lo contrario", apuntó hace unos días el editor de Edhasa, Daniel Fernández.INFLEXIÓNEn mayo hubo una inflexión, apunta la FGEE, y aún no hay datos fiables del mes de junio ni se conoce el impacto de las ventas de libros de texto, que pueden beneficiarse de la reforma de planes de estudio. Algunos editores, en privado, admiten que en los próximos meses reducirán las tiradas, restringirán el número de novedades en otoño y se plantean recortes de gastos. Pero creen que las familias recortarán su consumo en ocio sobre todo en bienes más caros que el libro, como la electrónica o los viajes.Acogiéndose a los resultados del año 2007, sin embargo, Ávila concluyó que la crisis "no ha afectado" a la industria editorial. Durante el año pasado se produjo un extraño fenómeno. Se vendieron más libros (un 9,9% más) pero más baratos, ya que, en cambio, los ingresos de los editores aumentaron solo un 3,6%, por debajo del IPC. O sea, las cifras de lectura (o al menos de compra) son, en palabras de Ávila, "magníficas", pero en parte este sector fue uno de los pocos que moderó sus precios: de 13,20 euros de media por libro a 12,45.En el sector se produjeron también otros movimientos de fondo: ceden terreno las librerías independientes, que vendieron un 1,1% menos aunque siguen pesando el doble que las cadenas, que sin embargo crecieron un 4,5%.

La venta en hípers y clubs del libro apenas varía y los kioscos, en cambio, aumentaron las ventas un 59%. "No se trata solo de los fascículos. Los 27.500 kioscos sirven para llegar a todas partes, y aumentan en ellos la venta de libros de bolsillo y best-sellers", apuntó el director de la FGEE.


P.D. Esta es nuestra mayor fortaleza y ,desde mi punto de vista, nuestro pilar existencial.

Nuestra posición en el mercado y "que llegamos a todas partes". Pensad en ello.

Un saludo.

martes, 1 de julio de 2008

Negro Futuro para los Vendedores de Prensa


Paseando por la red de redes, he encontrado un blog con esta entrada.-¿alguien piensa que puede acercarse a la realidad nos rodea?-


Los medios de comunicación escritos nos pueden contar que cada vez venden más ejemplares y todo lo que sus cifras quieran mostrar. De sobra se sabe que las estadísticas son la cosa más sencilla de manipular del mundo, ya que siempre habrá un dato a nuestro favor que tomaremos como la verdad universal. Si nuestro medio es el más leído entre la gente de 20 a 30 años ya podemos decir “somos el medio más leído”; y si de nuestro diario gratuito se reparten muy pocos ejemplares cada mañana siempre podemos suponer que cada ejemplar lo leen cincuenta personas y así afirmar “tenemos cinco millones de lectores diarios”… y así con cualquier parámetro imaginable. Sin embargo, hay una cosa que no es manipulable y que dice mucho más que todas esas cifras acompañadas de gráficas de colores: en mi barrio han cerrado tres quioscos de prensa en los últimos dos meses.

Primero fue la papelería Candy, que llevaba toda la vida en pleno centro del barrio y nada más cerrar fue comprada por una familia asiática para montar uno de tantos frutos secos que ahora abundan por todos lados (es curioso que hace años llegó el boom de los “todo a 100″ y ahora son los frutos secos los que abren de dos en dos en cada calle).
Pocas semanas después echaba el cierre el quiosco en el que compraba cromos de pequeño y que está situado frente al supermercado Ahorramás de Nueva Alcalá. Entre que sus dueños no tienen demasiado tiempo para el negocio y que últimamente no vendían ni la mitad que hacía unos años al final han tenido que echar el cierre definitivamente.
Por último, hace un par de días pasé por el quiosco de mi amigo Dani (hacía semanas que no me pasaba a saludarle, pero la última vez ya le noté muy quemado con el tema) y me encontré con un cartel que decía “se vende quiosco; preguntar por el señor Castillo en el 639…”, siendo el tercer quiosco cerrado en el barrio en apenas un par de meses. El cierre del quiosco de Dani es el que me ha llevado a ver que la situación de estos comercios se ha convertido en un espejismo de lo que fue poco tiempo atrás, pues cuando hace unos años me pasaba allí un par de horas de charla con él no pasaban tres minutos sin que se acercara alguien a comparar un periódico, una revista (por cierto, impresionante la cantidad de revistas X que se venden), un coleccionable… haciendo cada día unas cajas brutales y permitiéndole llevar una vida más o menos acomodada.
Pero claro, con la popularización de internet y la prensa digital los quioscos han notado un descenso de las ventas bestial. En parte es lógico, pues en internet tienes las noticias igual de desarrolladas que en papel y además al instante (es un verdadero atraso leer el periódico en papel y que en realidad estés enterándote de las noticias del día anterior). Es cierto que en las versiones digitales no suelen venir los editoriales ni ciertas secciones del diario de papel, pero pagar más de un euro por una información que tienes a cualquier hora en la pantalla de tu ordenador es algo un poco ilógico.
Y lo mismo digo de las revistas: si queremos información sobre, por ejemplo, los cangrejos de Nueva Guinea seguro que existe una página web dedicada al tema cuyo dueño la actualizará diariamente con las últimas novedades en ese campo. Las revistas de informática sin ir más lejos (que yo compraba a mantas años atrás) analizan dispositivos y equipos de los que en Internet tenemos análisis tan buenos o incluso mejores que los que pueda hacer una revista tradicional. Y eso sin contar con la cantidad de blogs de gente normal y corriente que expresa su punto de vista sus experiencias del día a día con ciertos dispositivos (bien sabéis que en la categoría denominada Tecnología de este mismo blog tenéis varios ejemplos de lo que os digo) que en ocasiones es lo que buscamos a la hora de decidirnos por algo, siendo más orientativo que un concienzudo análisis técnico.
En definitiva: los quioscos lo tienen complicado para salir del hoyo en el que están. Las tiendas de fotografía han sabido “reciclarse” gracias a la venta de cámaras digitales y la impresión en papel de las fotografías tomadas por la gente; pero los quioscos los tienen peor. ¿Qué se puede inventar tomando como base un quiosco que no sea otro quiosco? Mucho me temo que con los años recordaremos los quioscos como ahora recordamos a los serenos o al cobrador del autobús. Es una pena, pero la sociedad avanza y no espera a nadie.